La oficina se ha convertido en un lugar necesario en muchos hogares, ya que son muchas las organizaciones que, al menos, destinan un día de la semana al teletrabajo. Hay casi tantos tipos de home office como hogares, cada uno con unas características diferentes y un espacio determinado: grandes despachos, rincones en estancias de uso compartido como el salón o comedor, o pequeñas habitaciones. Independientemente de esto, contar con una mesa adecuada es fundamental.

Escritorios pequeños

Aprovecha el espacio al máximo con escritorios pequeños

Las oficinas ubicadas en zonas reducidas de la casa necesitan una mesa de trabajo acorde a estas medidas. Por eso los escritorios pequeños consiguen cumplir perfectamente su función sin necesidad de invadir grandes espacios. 

Este tipo de mesa puede ser un escritorio pequeño anclado a la pared o un escritorio esquinero pequeño, de forma que aproveches al máximo los ángulos de la arquitectura de tu hogar. Así, ocuparás el mínimo espacio sin renunciar a una mesa en la que poder desarrollar tus tareas y dar cabida al ordenador, documentos y todos los elementos necesarios para desempeñar tu trabajo de forma cómoda. 

Otra opción, cada vez más demandada, son las soluciones como escritorios abatibles. Es el caso de Talent 500, un escritorio elevable con tablero completamente adaptable tanto en altura como en posición. La ligera estructura de este escritorio incorpora ruedas, haciendo que pueda utilizarse en cualquier estancia de la casa y pueda almacenarse con facilidad.

Talent 500

El color y la iluminación como herramientas para ampliar el espacio

La oficina precisa una correcta iluminación para que todo se vea de forma adecuada, consiguiendo un equilibrio entre la luz ambiental y la artificial emitida por los dispositivos electrónicos de tu zona de trabajo. Las pantallas de los ordenadores que se colocan en el escritorio, aunque sean pequeñas, desprenden una luz que puede ser perjudicial para los ojos, creando molestos deslumbramientos y reflejos y dando lugar a sequedad o fatiga ocular. 

Por este motivo, una buena iluminación no solo contrarresta el efecto de la luz azul, sino que, además, trabajar en un ambiente correctamente iluminado también aumenta la productividad, eficiencia y bienestar en el trabajo. Los despachos con luz son más acogedores y dan sensación de claridad y amplitud, lo que contribuye a mejorar la motivación y el estado de ánimo. 

Para lograrlo, te recomendamos dar prioridad a la luz natural, ubicando el escritorio pequeño de tu home office cerca de una ventana. Completa este esquema lumínico con una luz más focalizada, mediante el uso de un flexo o lámpara de mesa. 

El color de los elementos que conformen tu oficina en casa también influirá en la claridad del espacio. Escoge la mesa de escritorio pequeña de un color claro, como blanco o beige, para dar sensación de mayor luz y amplitud. 

Igualmente, las tonalidades claras son fáciles de combinar entre sí y además ayudan a mejorar la concentración. Colectiva es la mesa de ACTIU que combina un diseño ligero con un revestimiento de tonalidades claras y maderas, lo que potencia la sensación de amplitud. 

Los errores más comunes que cometemos al montar la oficina en casa

Configurar una oficina en casa exige una planificación previa: la elección de la ubicación, la mesa de escritorio junto a la silla, la luz con la que vamos a contar en nuestra zona de trabajo, toda la instalación de cables, etc. Es probable que algún detalle se escape, por eso, una vez escogido tu escritorio pequeño ideal, te recomendamos no caer en los errores más comunes que cometemos al montar la oficina en casa. 

Evita tener una iluminación insuficiente o excesiva

No sabemos si vas a destinar el salón, comedor, cocina, biblioteca, terraza o dormitorio a tu despacho en casa. Pero te aconsejamos encarecidamente cuidar la iluminación natural y artificial que recibirá esta estancia. Como comentamos en el apartado anterior, la luz de la zona de trabajo debe ser óptima para asegurar que no se fuerza la vista o influir en el estado de ánimo. 

La situación ideal es contar con una ventana y acercar el escritorio pequeño lo máximo posible, ya que la luz natural tiene grandes beneficios a la hora de trabajar, y complementar con luz artificial será suficiente para las tardes. Para ilustradores, diseñadores o estudiantes, colocar la mesa frente a la ventana ayudará a recibir toda la luz posible. Sin embargo, si quieres evitar deslumbramientos, lo más indicado es colocar el escritorio de lado, recibiendo la luz natural diagonalmente, sin una incidencia tan directa.

Falta de separación entre el espacio de trabajo y el hogar

Para poder desconectar del trabajo una vez acabada la jornada lo mejor es separarla del hogar con una zona designada específicamente para este fin: un despacho, una buhardilla, o una habitación que no tenga gran uso. De esta forma, en tu tiempo libre, la casa no te recordará continuamente al trabajo y podrás disfrutar de los momentos de desconexión. 

Si no dispones de una estancia exclusiva para ello, puedes delimitar las zonas comunes con alfombras, estanterías y divisorias. De esta forma, conseguirás aislar y reducir los ruidos externos y ganarás en concentración, al no tener una aglomeración de elementos en tu campo visual. 

Organización: cómo prevenir el caos y desorden

Una oficina debe contar con una correcta organización, sobre todo en lo referente a la cantidad de documentos que manejamos a diario y que necesitan ser almacenados. Asegúrate de contar con el mobiliario adecuado que te permitirá mantener el orden, como los bucks con cajones. Esta cajonera está especialmente recomendada para los home office con escritorios de dimensiones reducidas, ya que se pueden ubicar debajo de la mesa con facilidad. Asimismo, te dejamos por aquí algunas claves para mantener tu escritorio pequeño recogido y ordenado durante todo el día.

Buck oficina
Cajonera oficina

No apostar por una buena silla de trabajo, la compañera ideal para tu escritorio pequeño

El error más frecuente que cometemos a la hora de montar nuestro despacho en casa es comprar cualquier mesa y silla, dos herramientas cruciales con las que vas a trabajar durante todo el día. 

Estos muebles se encargarán de tu nivel de comodidad, bienestar y salud, por lo que para crear un entorno seguro, saludable y productivo, te recomendamos invertir en una silla ergonómica que se adapte a tu cuerpo y a tus movimientos, como la silla Trim, una silla ligera que se adapta a la altura y movimientos de la persona. 

Decoración: ¿realmente importa la estética en mi zona de trabajo?

El último error que solemos cometer es pensar que una oficina no necesita decoración. Lo cierto es que pasamos gran parte del día en nuestro puesto de trabajo, por lo que contar con un espacio positivo, agradable y decorado a nuestro gusto es crucial para hacer frente a las largas horas, pudiendo incidir significativamente en nuestro estado de ánimo, nivel de motivación y bienestar general. 

Prueba a incluir algún elemento natural, aprovechando la tendencia del diseño biofílico, que ha demostrado contribuir a mejorar los niveles de relax, concentración y calidad del aire.