Una de las ventajas de utilizar una silla de oficina con reposacabezas es que corrige la posición de las cervicales.
Habitualmente cuando las personas hacen uso de una silla común sin reposacabezas, tienden a tensar las cervicales hacia abajo o hacia delante, lo que termina causando dolores y molestias temporales o incluso crónicas en la zona cervical. Por ello, es muy importante hacer uso del reposacabezas, ya que conseguiremos evitar este problema.
Otra ventaja de las que podrás disfrutar utilizando una silla de oficina con reposacabezas es trabajar con total comodidad, ya que tendrás la cabeza apoyada en todo momento, asegurando una postura cómoda.
Para ello, es importante ajustar bien el reposacabezas, teniendo en cuenta la altura en la que se encuentra el ordenador, para no forzar las cervicales. Otra característica que debes tener en cuenta a la hora de ajustar el reposacabezas es que no quede forzando la postura hacia adelante o hacia detrás, lo ideal es que el reposacabezas quede ajustado lo más recto posible.
Al final de la jornada laboral podrás notar que la columna y las cervicales no están sobrecargadas y por consiguiente terminarás el día sintiéndote liviano y descansado en lugar de sentir pesadez y agotamiento, que es la sensación que llegamos a alcanzar al trabajar muchas horas en una silla convencional.