El primer dato que hay que tener en cuenta a la hora de elegir muebles para organizar documentos es el espacio que tenemos para ubicar nuevos muebles para el almacenamiento de archivos físicos.
Tras ello, hay que ver qué mobiliario para organizar documentos se adapta mejor a ellas y luego saber distribuirlos de forma correcta para lograr facilitar la dinámica de trabajo y agilizar las tareas de búsqueda de papeles. Es recomendable que una vez instalados todos los muebles de archivo, en la habitación exista el suficiente espacio para caminar sin obstáculos y que esta dé una sensación de libertad.
Si hay una gran amplitud de espacio, puedes optar por incorporar un armario archivador de metal. Esta es una de las soluciones más eficaces, ya que permite concentrar todos los documentos en un mismo espacio y tenerlos bien organizados, además de clasificados según corresponda. Por lo general este modelo de mueble lleva cajones y cerradura, en algunos casos, para proteger todavía más los documentos guardados.
Por el contrario, si contamos con un espacio acotado, los bucks o cajoneras de oficina son una opción a tener en cuenta. Estos se pueden ubicar en el lateral o debajo de la mesa de oficina, lo que hará que no debas moverte de tu espacio de trabajo para buscar archivos, manteniendo la concentración. Los bucks de melamina de ACTIU incorporan ruedas, por lo que podrás moverlos a cualquier rincón de forma sencilla.